He evolucionado a la par que lo ha hecho el sector del marketing. De Consultor de Marketing (cuando nuestro trabajo se centraba en desarrollar planes de marketing y campañas en prensa escrita, radio y algo de tele), a consultor de marketing digital (ya hacíamos webs cuando aun no existía WordPress), mucho ecommerce y mucho Google y Facebook Ads para captar clientes para esas tiendas online. Después de trabajar con cientos de empresas desde mi propia agencia (catorce años dan para mucho) me di cuenta de que casi todas las empresas tienen procesos de venta deficientes, incluso las que venden productos o servicios por cientos de millones, se dejan un montón de ventas en el camino por no trabajar bajo una metodología bien definida. Combinamos personalización para conseguir buenos ratios de ventas, con automatización para llegar a más prospectos sin necesidad de escalar los equipos de marketing y ventas. Soy persona de contradicciones, por eso mis aficiones son tan dispares como el boxeo o la lectura y el cine. Pero si me tuviese que quedar con una sola, sería hablar de lo humano y lo divino durante una buena sobremesa acompañada de una copichuela. Mi hija Daniela, es lo mejor que ha pasado en la vida